lunes, 7 de marzo de 2011

Pocos óscars


Este año se ha echado de menos que no hubiera más premios a repartir en los Oscar. El viernes vi El cisne negro y creo que Natalie Portman se llevó merecidamente el premio. Me encanta ver evolucionar a esta actriz a la que descubrí como una niña atrevida con gestos de tímida en Beautiful girls.

Pero el sábado fui otra vez al cine, esta vez a ver la historia de dos lesbianas cuyos hijos, nacidos por inseminación artificial, deciden conocer a su padre. Y tengo que decir que Julianne Moore está fantástica y Annette Bening, espectacular, especialmente cuando se pone a cantar en la cena familiar (no cuento más). Así que por una vez pensé en lo injusto que es repartir tantos óscars unos años y que otros sean tan pocos. Los chicos están bien, a la que pertenecen las fotos (en una las madres, en otra los hijos), es una buena película que probablemente no me habría animado a ver si no hubiera leído el reportaje de Rocío Ayuso en EPS.

Para terminar mis comentarios sobre las pelis que fui a ver (al cine, por supuesto) la semana pasada, tengo que mencionar a otro actor que también merecía un premio gordo, con permiso de Colin Firth (El discurso del rey la tengo aún pendiente): Jeff Bridges en Valor de ley, un nuevo acierto (no siempre es así) de los hermanos Coen.

1 comentario:

Maria Rosa dijo...

Totalmente de acuerdo con tus comentarios sobre las películas. Natalie Portman se merece el Oscar porque realmente se metió en el papel y es increible como logra parecer un angel y un mal bicho a la vez. No obstante, comparto contigo la opinión sobre "Los chicos están bien" y la escena de Anette Bening cantando es genial. Entraré en tu blog antes de ir al cine! MRosa